13 enero, 2013

Pre-declaración temprana

Eres de esas mujeres tardías;
de esas que aparecen con el último respiro,
haciendo dudar a los viajeros
que al final parten como siempre.
Como siempre.
Y de qué sirve llorar
y de qué sirve decir
que ya no hay caso,
maldiciendo este destino
de viajar en soledad.
Porque eres de esas mujeres tardías;
de esas que aparecen con el viento,
haciendo sucumbir al impreciso
que estuviera pensando en fantasías.
Mas como yo no soy poeta,
y soy pirata de ocho mares,
quito el velo de tus ojos,
miro hasta donde cabe mi retina,
y sonrío con esa cara tonta
que está de más y que está de menos,
porque sabemos, los dos sabemos,
qué ridículo es el hombre
cuando se enamora
antes
de tiempo.